¿Náuseas en el embarazo? Te damos 3 claves para remediarlas
Las náuseas y vómitos como primeros síntomas del embarazo
Uno de los primeros síntomas del embarazo que padecen muchas mujeres, incluso antes de hacerse el test de embarazo, son las náuseas y los vómitos, también conocidos como “emesis gestacional”. Más de la mitad de las mujeres presentan náuseas o vómitos durante las primeras semanas de gestación. De hecho, ocurre con frecuencia que este sea el único síntoma del embarazo para muchas mujeres hasta que no empiezan a notar la hinchazón del vientre.
Por suerte, en la mayor parte de los casos las náuseas y vómitos son moderados y desaparecen después del primer trimestre de gestación. En una de cada cuatro mujeres pueden persistir hasta el mismo momento del parto. Sin embargo, no hay que alarmarse: estos síntomas del embarazo son muy molestos, pero no se consideran una enfermedad porque no son peligrosos para la madre ni para el feto.
Las náuseas y vómitos sólo deben preocuparnos si ocurren con excesiva frecuencia, más de tres o cuatro veces al día, especialmente si impiden retener ningún alimento durante al menos 24 horas. Estos casos extremos, que afectan tan solo a 1 de cada 100 mujeres, se conocen como “hiperémesis gravídica” y deben ser valorados por el médico.
¿Por qué son típicas las náuseas del embarazo?
Durante los primeros meses del embarazo se dan fuertes cambios hormonales que influyen en cómo se perciben los olores y sabores. Por esta razón, es frecuente que ciertos olores incomoden y que aparezca el asco a ciertos alimentos. Esta aversión a olores y sabores pueden causar náuseas y acabar provocando los vómitos.
Asimismo, otros alimentos pueden resultar más apetecibles de lo habitual. Por ejemplo, es típico en muchas embarazadas que tengan más apetito por los dulces y por los cítricos, mientras que la carne y el café causan repulsión en muchos casos.
Otra de las causas que se considera probable es la tendencia a las bajadas en el nivel de azúcar en sangre. Durante las primeras semanas de gestación, el crecimiento fetal y de la placenta consumen mucha energía en forma de glucosa. Esto, a su vez, explica por qué las embarazadas suelen tener más deseo de comer dulces.
Cuando pasa un periodo largo de tiempo sin consumirse ningún alimento, las reservas de azúcar disminuyen y esto puede provocar malestar y náuseas. Esta es una de las razones por las que las náuseas son uno de los síntomas del embarazo que aparece típicamente por la mañana, después del ayuno nocturno.
Finalmente, la secreción de jugos gástricos y la digestión se ven modificadas a causa de la gestación. Esto ocasiona que otro de los síntomas del embarazo sea el ardor de estómago y el reflujo, que a su vez pueden ocasionar el vómito.
¿Cómo remediar las náuseas del embarazo?
Es imprescindible seguir las indicaciones del ginecólogo, pero los siguientes 3 consejos pueden resultarte útiles para aliviar las náuseas durante el embarazo:
- Evitar los alimentos que resulten fuertes o con olor desagradable es esencial. También es aconsejable evitar los picantes y las cocciones que resulten pesadas de digerir, como las frituras.
- Es preferible consumir pequeñas cantidades de alimentos varias veces al día, cada 2 o 3 horas, en lugar de hacer solo tres comidas abundantes. Esto facilita la digestión a la vez que reduce las probabilidades de bajada de azúcar.
- Remedio rápido cuando aparece la náusea es restablecer los niveles de azúcar en sangre y restaurar el pH del estómago. Emenea® jarabe y Emenea® monodosis son una solución no farmacológica, a base de azúcares de absorción rápida que reducen las contracciones del estómago que causan las arcadas en pocos minutos. Su fórmula a base de glucosa, fructosa y ácido fosfórico también ayuda a disminuir el reflujo gástrico con un agradable sabor a cereza o lima-limón.
Las náuseas y vómitos suelen ser de los primeros síntomas del embarazo en manifestarse. Sin embargo, siguiendo unas pautas alimenticias adecuadas y con un poco de ayuda, puedes controlarlos para disfrutar plenamente de esta etapa de tu vida.